Alexei Navalny, destacado líder opositor ruso de 47 años, falleció de manera sorpresiva en la prisión ártica donde estaba recluido desde diciembre, según comunicaron los servicios penitenciarios de Rusia. Aunque se le realizaron intentos de reanimación, los médicos no pudieron salvarlo.

Desde el Kremlin, Dmitri Peskov, portavoz de la Presidencia rusa, declaró que no disponen de información sobre las razones del fallecimiento del líder opositor. Este pronunciamiento llegó poco después de que se confirmara la muerte de Navalny por parte de los servicios penitenciarios. 

Se informó que Navalny se sintió mal tras dar un paseo en la penitenciaría IK-3 en la localidad de Jarp, situada en el distrito autónomo Yamalo-Nénets. 

A pesar de la rápida atención médica, no se logró salvar su vida. Los servicios penitenciarios han anunciado el envío de una comisión para esclarecer las circunstancias del fallecimiento. Mientras tanto, la portavoz de Navalny, Kira Yarmish, afirmó que sus correligionarios aún no tienen confirmación oficial de su muerte.

Navalny fue trasladado a esta prisión ártica, apodada "Lobo Polar", en diciembre pasado desde una cárcel en la región de Vladímir. Esto ocurrió después de anunciar una campaña contra la reelección del presidente ruso, Vladimir Putin, quien ha estado en el poder desde el año 2000. 

El traslado a otra prisión, conocido como "etapirovanie", puede prolongarse durante semanas, durante las cuales el recluso suele estar incomunicado. 

Tanto Estados Unidos, la Unión Europea y Amnistía Internacional han expresado preocupación por el destino de Navalny, considerado un enemigo clave del Kremlin. 

En una última declaración desde la cárcel el pasado 7 de diciembre, Navalny instó a votar en contra de Putin en las elecciones de marzo de 2024. Además, anunció el lanzamiento de una página web que exhortaba a los rusos a apoyar a cualquier candidato a la presidencia excepto a Putin.