Juan Luis Castro, presidente de la Comisión de Salud del Senado, aborda la Crisis de las Isapres y posibles salidas
En nuestro país, casi 14 millones y medio de personas se atienden en la Salud Pública. Son usuarios de Fonasa que reciben atención gratuita en los consultorios, Cesfam y Hospitales. El problema es que la espera para una cirugía -por ejemplo- puede demorar años.
Quienes se atienden en la Salud Privada son poco más de 3 millones de personas. En el último tiempo, 300 mil afiliados migraron desde las Isapres a Fonasa.
Quienes cotizan en las Isapres, hoy están preocupados. Durante largos años las Isapres han mantenido miles de planes de salud distintos: discriminaron a las mujeres a los mayores y a las personas con enfermedades crónicas, subieron sus precios hasta colmar la paciencia de miles de afiliados que llevaron sus reclamos a los tribunales para intentar frenar las alzas y lo consiguieron, en la mayoría de los casos, la Justicia les dio la razón a esas personas, hasta que la Corte Suprema dijo basta: las Isapres tienen que ceñirse a la tabla única de factores que elaboró la superintendencia en el año 2019: una tabla estándar. Además, tienen que devolver a la gente los cobros que se realizaron en exceso.
Si las Isapres dicen que no pueden pagar y amenazan con desaparecer, ¿cuál es la fórmula de salida?
Conversamos con el Senador de la Región de O'Higgins, Juan Luis Castro, Presidente de la Comisión de Salud del Senado.
Según el subsecretario de Educación, Víctor Orellana, aproximadamente un millón de personas tienen deudas asociadas al CAE, mientras que en general, cerca de dos millones están inscritos en diversos sistemas de crédito.