El Banco Central entregó su primer Informe de Política Monetaria, en el que se acortaron las perspectivas de crecimiento para este año y el próximo.  

En el 2022 pasó de 1,5% a 2,5% a un rango entre 1% y 2%. Mientras que, en el 2023 la situación se prevé de peor manera, ya que se distingue una probable contracción de la actividad dejando el rango entre -0,25% y 0.75%. 

En el 2024 se espera una expansión en torno a su potencial, de entre 2,25% y 3,25%.

El Banco Central explicó que “es importante notar que estas estimaciones difieren significativamente de las expectativas privadas, las que suponen que tanto el consumo como la inversión seguirán expandiéndose en 2022 y 2023, y que el aumento del PIB se ubicará por sobre el límite superior del rango previsto para cada año”.

Según el análisis, apuntan a que la economía estaría en una reducción de los elevados niveles del gasto del año 2021. Proceso que ocurre de forma más rápida de lo que estaba previsto. 

Otra de las variables que no ha dejado de estar al alza es la inflación. En el informe se sostiene que esta medición ha seguido en aumento llegando a casi el 8% anual. El motivo principal de esta alza, en base al documento entregado por el Banco Central, es el significativo impulso al gasto durante el 2021 y sigue siendo el determinante del alza de la inflación. 

Al respecto, el Banco Central se refiere a que "las cadenas de distribución global aún no logran recuperarse de los efectos de la pandemia y, entre otros factores, siguen presentando disrupciones debido al alza de los contagios de Covid-19 y la política de tolerancia cero de China”, menciona el texto.