Más de 300 familias de Valparaíso tuvieron una Navidad muy triste. Un incendio, cuyas causa todavía se desconocen, comenzó en el Cerro Rocuant y se extendió a San Roque. El viento, la basura acumulada en las quebradas y el material de las casas, hicieron que, en cuestión de horas, las llamas desataran la tragedia. 245 casas arrasadas es el último balance. Ahora, 18 camiones trabajan sacando escombros con ayuda de las familias, cientos de voluntarios y personal de emergencia. Los albergues continúan funcionando y los servicios públicos, incluido el Registro Civil y un equipo de apoyo económico para pymes, están trabajando directamente con las personas que perdieron todo. El Gobierno reunió a la mesa técnica para coordinar la ayuda a los damnificados y el proceso de reconstrucción.
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El Presidente se pronunció en el Hospital Clínico de la Universidad de Chile, donde nació su primogénita el miércoles 25 de junio.