A través de un comunicado, Gendarmería informó que aceptó la renuncia de tres oficiales, a raíz de la fuga de seis internos, ocurrida el viernes pasado justo al momento de la entrega del pan en la Cárcel de Valparaíso.
Junto a la coronel Sandra Toledo, directora de Gendarmería en la Región de Valparaíso, Luciano Chávez, director regional subrogante al momento de la fuga, y la teniente coronel Romina Campos, jefa operativa del recinto penitenciario, también fueron desvinculados. “Tras el análisis de los antecedentes recabados” y por decisión del director nacional Christian Alveal, informaba el comunicado oficial.
Después de la fuga de los seis internos, Gendarmería implementó una “intervención integral” que contará con un diagnóstico general de las operaciones, recursos y situación de cada establecimiento penal de la zona, a cargo del subdirector operativo de Valparaíso, Pablo Toro Fernández.
Ningún interno ha sido recapturado, pero dos de ellos ya fueron identificados: Christian Lucka Cortés, de 26 años, proveniente de Illapel, Región de Coquimbo, más conocido como “el Cisarro Illapelino”, por su corta edad y una gran cantidad de robos y delitos en los que ha estado involucrado y, Kevin Mondaca, de 29 años, originario de Coquimbo, quien desde pequeño se ha visto envuelto en delitos que lo han llevado a estar en varios recintos carcelarios y del Sename.
El alcalde de Santiago asegura que nunca tuvo acceso a los mensajes en cuestión, generando debate sobre su origen.
El gobernador regional señala que no ha denunciado ni acusado a nadie, y cuestiona cómo llega tanta información a la prensa.