Tomás Bravo, de 3 años, estuvo desaparecido durante 9 días en la Región del Biobío. Había salido junto a un tío, que lo dejó solo durante varios minutos, para buscar a un animal que se había escapado. Luego de una búsqueda de 9 días, el cuerpo fue encontrado en el sector de Caripilún, en la Provincia de Arauco.
En un primer informe, el Servicio Médico Legal (SML) estableció que Tomás murió por hipotermia e inanición. Es decir, por efecto del frío y la falta de alimento. Pero ahora, el propio SML y un laboratorio forense de EE.UU, determinaron que el niño fue víctima de una agresión sexual.
El informe de la perito criminalista del SML, Vivian Bustos, reforzó las conclusiones del peritaje internacional y confirmó la intervención de terceros, aunque no entregó detalles de la causa de muerte.
Esta información impulsó al padre de Tomás a pedir una ampliación del plazo de investigación. Por su parte, la Fiscalía del Biobío descartó -por completo- una muerte de carácter accidental e informó que la investigación se va a concentrar, únicamente, en que el fallecimiento de Tomás ocurrió por la intervención de terceros.
Con estos nuevos antecedentes, la madre de Tomás Bravo, Estefanía Gutiérrez, afirmó que “acá hay un culpable suelto”.
La mayor concentración de inmigrantes internacionales se ubica en la Región Metropolitana, con un 60%, seguida de Antofagasta, con un 7,7%; y Valparaíso, con 6,3%.
El tribunal consideró que el amparo no era la vía adecuada y criticó una afectación al debido proceso.