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La versión del Gobierno es que –este miércoles- en la Ruta P72, que une Cañete y Tirúa, se produjeron 2 emboscadas contra la policía y La Armada durante los patrullajes dispuestos en medio del Estado de Emergencia.
El ministro del Interior dijo que el camino estuvo "tomado parcialmente por mucho tiempo por orgánicas radicales, muchas con tinte violento y terrorista que en el pasado se tomaron fundos", y donde "la semana pasada logramos derribar un punto de control territorial, vale decir una especie de peaje, y que recuperamos para el libre tránsito".
El Jefe de la Defensa Nacional en el Biobío, el contraalmirante Jorge Parga exhibió un video y expliquó que "A las 13:50 de hoy, personal de Carabineros que se encontraba efectuando un procedimiento en la ruta comunica alrededor de 15 individuos encapuchados derriban un paradero en el lugar, para luego rociarle líquido acelerante y quemarlo. Además, se indica que en lugar había neumáticos en combustión obstaculizando la ruta". Agregó que "Carabineros se acerca para verificar la situación, cuando son atacados con armas de grueso calibre, por lo cual hicieron uso de disuasivos químicos para dispersar a los individuos. Más tarde, alrededor de las 14:35 horas, arriba Infantería de Marina en apoyo, instante en que los individuos se repliegan hacia zonas boscosas, y ocultos en follaje del bosque atacaron y emboscaron al personal”. Dijo que el personal de la Armada repelió el ataque “En primera instancia con munición no letal y tiros de escopeta", pero ante "el constante fuego por parte de los encapuchados, el personal debió hacer uso de su arma de servicio. (…) Los individuos se alejaron del área (...) y más tarde recibimos la información de que, aproximadamente a las 17:30 horas, dos heridos llegaron al Cesfam de Tirúa, quienes no podemos confirmar que tengan relación con el incidente".
La Fiscalía dispuso un equipo multidisciplinario de la PDI para investigar lo ocurrido y que terminó con dos hombres de 23 y 44 años fallecidos con impactos de bala. El primero de ellos, ingresó fallecido al Cesfam de Tirúa y el segundo, murió mientras era llevado a un centro asistencial de La Araucanía.
En la conferencia de prensa que ofreció a las 21:30 horas, el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, explicó que –hasta entonces- había e personas heridas. El jefe del gabinete defendió el estado de emergencia, que rige desde el 13 de octubre en las provincias de Biobío y Arauco y en toda la Región de La Araucanía.
INDH llamó a silenciar las armas y buscar el diálogo
El Instituto Nacional de Derechos Humanos exigió una investigación “seria, imparcial y efectiva" y pidió "silenciar las armas y buscar vías de diálogo" ante la crisis en la zona.
El gobernador del Biobío, Rodrigo Díaz, lamentó el fallecimiento de dos comuneros mapuche y dijo que "era bastante esperable que esto terminara ocurriendo". Agregó que "El estado de excepción era la crónica de una muerte anunciada. No porque no pudiera haber un estado de excepción, sino porque había un abordaje parcial de la problemática que nos afecta, que no sólo es de orden público, sino también económica, política y social".
Entre ellos, se encuentran mensajes de WhatsApp que cuestionan las declaraciones públicas de la diputada Catalina Pérez (RD), quien ha negado conocer los detalles del acuerdo.
Además, el presidente Boric y el subsecretario Cordero defendieron el actuar del Gobierno, mientras que la familia de la denunciante expresó su preocupación por la demora en la formalización.